jueves, enero 27, 2005

Deseo

¿Porqué será que el deseo me mueve tanto? ¿Será posible que en todos lados se manifieste la eterna lucha? Los deseos, los instintos, en lucha constante con las reglas, la verguenza, el miedo.... Imposible es contener los latidos cuando enfrente está tu "objeto del deseo", al cual no puedes dirigirte con franqueza. Tu cuerpo lucha por salir a flote, tu mente lucha por conservar la calma, por detener el temblor de la excitación....La pobre cabeza, que lucha contra ella misma, perdida entre sueños desbocados y sublimes, tratando de actuar como mejor sea, aunque eso vaya en contra de tu propia naturaleza. El deseo contra el deber. ¿Y que coños sé yo de mi "objeto del deseo"? ¿Me desea también? Ojalá estas cosas fueran más fáciles. Ojalá todas las barreras se rindieran y los obstáculos se desmoronaran ante los deseos. Ojalá pudiera leer el pensamiento....
Ojalá fuera otro, otra persona en otro lugar para tomar riesgos y volverme una hoja abatida por el viento. Ojalá mi vida fuera la novela que quiero escribir.
Por ahora no se ha satisfecho al deseo. Por ahora sigo vibrando ante su presencia, sigo soñando despierto y luchando entre las nubes misteriosas, atractivas y distantes de su misterio.