D.D.L.B.

Se acerca el día. Como cada año, se volverá a cerrar el círculo, se continuará la tradición, se fortalecerá la amistad. Un año más y mis hermanos, Los Brozzos, siguen conmigo. No cabe duda que los verdaderos amigos son realmente la familia que elegimos. No cabe duda que ellos son y han sido una de las pocas constantes en mi vida. El amor desinteresado, la ayuda mutua, la comprensión: Conceptos que pueden volverse demasiado vagos cuando no se tienen amigos como los que yo tengo, y no es presunción ni una invención; ojalá todos tuvieran amigos como estas nueve personas que de una manera u otra han enriquecido mi vida desde que ésta era sólo un sueño, un concepto muy abstracto. Puedo decir que celebro un año más de haber descubierto el infinito tesoro, el que cada día se hace más grande y más profundo: la amistad que me enriquece y me alimenta, que me hace -simplemente- una mejor persona. ¡Salud!